lunes, 29 de agosto de 2011

EDUCACIÓN Y COMUNICACIÓN EN EL CIBERESPACIO

EDUCACIÓN Y COMUNICACIÓN EN EL CIBERESPACIO

UNA RESPUESTA PEDAGÓGICA A LA CONSTRUCCIÓN DE LA REALIDAD POR LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

INTRODUCCIÓN Y PLAN DEL TEMA

Lo primero que he de advertir al lector es que he constituido el presente ensayo básicamente en dos partes. En una primera, he llevado a cabo un análisis de la sociedad actual, destacando el poder de los medios de comunicación como artífices y constructores de la realidad. Y, en segundo lugar, he propuesto una alternativa que recoge los nuevos retos de la educación para el futuro y la importancia de educar para los medios y fomentar antiguas-nuevas y necesarias cualidades para lograr ciudadanos competentes, participativos, comprometidos con los problemas de su sociedad y libres.

Comenzaré caracterizando brevemente la sociedad actual. Vivimos en un mundo globalizado, siendo la tecnología y los medios de comunicación la columna vertebral de dicha sociedad. Los poderosos han comprendido que en una sociedad que respira gracias a la circulación de información, es imprescindible controlar el flujo de esta información, aún a riesgo de manipularla y tergiversarla. Y es por ello mismo que se hace tan urgente un nuevo modelo de educación.

Llevaremos a cabo un análisis de cómo los medios construyen y tejen una realidad que es la que les interesa mostrarnos. Veremos algunas técnicas de manipulación y el modo de combatirlas a través de la formación.

La alternativa que presento a la construcción de la realidad por los medios de comunicación utiliza la misma tecnología de la que se vale el poder, pero, utilizando la expresión del profesor de la Universidad sevillana de Filosofía, Ramón Queraltó, como un caballo de Troya “al revés”. La manera es convertir los medios en aliados, incluirlos en la metodología docente. De entre todas las características de Internet, merece la pena destacar la interactividad. Gracias a ella, la red ofrece la posibilidad de réplica, de actuar como un elemento de resistencia.

PLAN DEL TEMA
1. Sociedad del conocimiento: velocidad y violencia.
2. La conversión de la sociedad en audiencia.
3. Algunas claves para reivindicar información veraz.
4. Nuevo paradigma pedagógico: educomunicación.
5. La importancia de la representación.
6. Conclusiones.
7. Bibliografía.

1. SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO: VELOCIDAD Y VIOLENCIA

Los medios de comunicación participan cada vez más en nuestra representación de la realidad y hasta podíamos decir que son los verdaderos artífices de ella, a modo del demiurgo platónico. Son los medios los que difunden velozmente los acontecimientos, al mismo tiempo que éstos tienen lugar. Es por ello mismo, por la rapidez con la que se transmiten los “hechos” que es imposible tomar distancia, comprender y reflexionar, pues tales acciones son opuestas al vértigo que provoca lo inmediato. De esta manera, la velocidad con la que se produce y transmite la información se convierte en algo dañino y nocivo para el conocimiento. Una violencia silenciosa y sutil, de la que ya nos advirtió Eduardo Nicol en su obra “El porvenir de la filosofía”, que convierte las palabras y las imágenes en escepticismo y desinterés por lo social.

Las posibilidades cognoscitivas son prácticamente inabarcables. Los medios de comunicación, Internet, base de datos…Se ofrece un menú que se espacia a lo largo de las cuatro coordenadas cartesianas de la historia del hombre. Los “media” constituyen un supermercado de datos de todos los estratos culturales del presente y del pasado ofrecidos simultánea y globalmente.
El resultado es que el hombre actual se encuentra en contemporaneidad con todas las épocas, ya que en la “realitas mediática” ha desaparecido la sucesión cronológica casual de los acontecimientos. Es el reino de la pluriformidad de las diferencias, una especie de presente cultural continuo. Esta característica genera una nueva dimensión existencial y una nueva percepción de la realidad.

Para citar algunos de los rasgos que confluyen en la formación de juicios de valores y de conducta del hombre actual he recurrido al manual de Filosofía de Mariano Moreno Villa, Volumen II Antropología, Psicología y Sociología, de la editorial Mad, en concreto al tema que lleva por título “El desarrollo de la técnica y sus implicaciones en la sociedad contemporánea”, (páginas 507 y 508) porque me parece un diagnóstico muy certero y pertinente en cuanto al tema que nos ocupa. Me he permitido resumir dichas características y personalizarlas, para insistir en aquellos aspectos que, en mi opinión, radiografían el espíritu del hombre actual:

- Disolución de la unidad direccional de la conciencia. Es el imperativo categórico de un estereotipado Carpe diem. La conciencia debe decidir y actuar al instante.

- La conciencia se encuentra ante un universo de máscaras, distintas repeticiones de un mismo modelo. Es el paso del ser a la apariencia. Se está sumergido en un universo de copias. Liberada de la pasión por el significado original, la conciencia comienza a apreciar un arte de vivir en el que son decisivas la capacidad de adaptación a las circunstancias y los nuevos modelos.

- Lo único eterno del hombre ofrecido por la realitas telemática es la presencia del substrato cultual común. El esfuerzo mayor se centra en hacer lo posible dentro de lo posible, con un pragmatismo sin horizonte de futuro, sin proyecto.

- Se verifica una insensibilización de la conciencia respecto a los valores. Cosmovisión en la que falta la referencia a cualquier tipo de valor permanente. Problema: delegación masiva del poder de desear, de decidir, de la propia responsabilidad de juicio. Se añade, mensajes subliminares, más que los tiempos de información y de reacción de la conciencia son diferentes.

- A la filosofía del ser y de lo auténtico sucede una filosofía del compromiso. Viviendo en una cultura del letargo el individuo pierde el sentido crítico. Lo único por hacer es aprender la técnica del compromiso como estilo de vida.

- La conciencia se libera de toda ilusión ideológica. Vida social: mero fruto de la convención. El único fundamento: el consenso común sobre los papeles que hay que representar.

En definitiva, asistimos a una crisis de la voluntad, una huida de la responsabilidad, del compromiso, de la disciplina.

2. LA CONVERSIÓN DE LA SOCIEDAD EN AUDIENCIA

Ha ocurrido, en palabras de Habermas, la progresiva colonización del mundo de la vida por el sistema de los mass media: conversión de la sociedad en audiencia.
Son los medios de comunicación los que construyen la realidad. Y la presentan como algo “natural” e irremediable: gusten o no, nos dicen que las cosas son así y no pueden ser de otra manera. Se produce la negación del carácter de construcción que tiene la realidad social.
Se supone que los hechos ya están en la realidad tal y como aparecen luego en las pantallas. Los medios lo único que hacen es transmitirlos y distribuirlos, sin llegar a influir sobre ellos.

Hay un enorme condicionamiento intelectual. La huella que dejamos en la red proporciona una base de datos que facilita crear perfiles de los individuos. Esta información será luego utilizada para retroalimentarnos con informaciones e ideas que nos son familiares, así como para el consumo. De manera que al final se produce la uniformización del pensamiento.

Me gustaría traer aquí a colación un artículo que leí el pasado domingo, día 8 de Agosto, publicado en el País digital, titulado “No es fácil ser minoría”, publicado por el asesor de comunicación Antonio Gutiérrez Rubí. En él nos cuenta cómo la red nos alimenta con “nuestro propio credo”, es decir, al visitar determinadas páginas, dejamos una huella que será utilizada posteriormente para enviarnos más información sobre nuestros gustos y preferencias. Antonio Gutiérrez utiliza la expresión “de lo relevante a los semejante”. A la larga, esto acaba por empobrecer el pensamiento y favorece el adoctrinamiento con aquello que nos es conocido y familiar. Con lo cual, la capacidad de crítica disminuye. El autor argumenta que esto nos reconforta porque es más facil asentir que disentir, ya que ser minoría e ir a la contra siempre es una postura más complicada por el rechazo social que comporta. Y para terminar hace una llamada a reivindicar la diferencia y la pluralidad, garantes de la libertad.

Así pues, ándense con ojo porque la sociedad del conocimiento es también la sociedad del control y la vigilancia.

3. ALGUNAS CLAVES PARA REIVINDICAR INFORMACIÓN VERAZ

Como acabamos de ver, hay dos niveles desde los que acercarse a las noticias y comprenderlas: desde el conocimiento, y desde las actitudes y opiniones socialmente compartidas. Entonces, para valorar una noticia disponemos no sólo de conocimientos “racionales”, sino que también contamos con emociones, sentimientos y actitudes. En consecuencia, propongo a continuación algunas claves tomadas en préstamo de Edgar Morin que pueden orientarnos en nuestra condición de ciudadanos y de receptores para reivindicar nuestro derecho a una información veraz y a un desenmascaramiento de la realidad mediática:

Educación del sentido crítico: La formación del sentido crítico supone no sólo un cambio de los contenidos de la educación, sino también un cambio metodológico. Se trata de un aprendizaje de y para la vida. Es un conocimiento que parte de la realidad y que constantemente remite a ella.

Fomentar la participación y educar en el sentido crítico supone asumir un modelo comunicativo en el que el diálogo sea un elemento clave, que ayude a superar los esquemas de pasividad a los que acaba habituando la recepción mediática cuando es consumido acríticamente.
Un modelo que permita al ciudadano asumir el rol de actor de su propia vida, y no resignarse a asumir perpetuamente el papel de espectador pasivo.

Transformar la información en conocimiento: La información debería conducir, tal y como señala Paulo Freire, a un proceso de formación de las personas que las lleve a la transformación de la realidad.
Esta dinámica de información-formación-transformación está lejos de ser la propuesta por los medios y de muchas prácticas educativas.

Educación en medios, democracia y diversidad: El proceso de globalización de la economía (y con ella de la cultura, de los medios…) nos lleva a hacer realidad la “aldea global” pensada ya hace unos cuantos años.
La diversidad es una realidad que está presente en las pantallas. Pero esta diversidad, ¿lleva de verdad a la aceptación de las diferencias del otro? ¿es una diversidad que lleva a la pluralidad?
Existe el riesgo de caer en la “asimilación” del otro que es distinto a nosotros.
Como señala acertadamente Martín Barbero, la tendencia de nuestro sistema es buscar en las otras culturas lo que más se parece a la nuestra. No quedará más remedio que “estilizar” y “banalizar” al otro, simplificarlo, estereotiparlo, volverlo asimilable sin plantearse el esfuerzo de comprenderlo.
Por otra parte, se utiliza el mecanismo de distanciamiento con el otro que es distinto: se le exotiza, se le buscan la parte folclórica, también para obviar cuestiones más complejas que puedan llevarnos a pensar…
La integración es, por otra parte, la capacidad de aceptar al “otro distinto a mí” desde su realidad y complejidad, sin hacerle pasar por mis esquemas para que pueda existir. Supone plantear un diálogo que favorezca el mutuo enriquecimiento.

3. NUEVO PARADIGMA PEDAGÓGICO: EDUCOMUNICACIÓN.

Por todo lo dicho, es urgente la necesidad de presentar un nuevo modelo educativo que forme a nuestros alumnos en una sólida educación para los medios y que se haga cargo de los principios que hemos subrayado más arriba para reivindicar la veracidad. Tales principios deben ser interpretados como normas para la docencia.

Nuevo modelo educomunicativo

Es necesario un nuevo sistema educativo, pues el actual está agotado. La sociedad ha cambiado mucho desde que éste se diseñó, hace aproximadamente 150 años.
De los nuevos cambios protagonizados por la asunción de las TIC y su aplicación a la docencia destacamos que las coordenadas espacio temporales ya no son condicionantes de la interacción social.

El conocimiento ha dejado de ser lento, escaso y estable. La escuela tiene que hacer frente a un currículum que corre paralelo al de la institución. La apuesta es a favor del “aprender a aprender”, ofreciendo criterios para seleccionar, filtrar y discriminar la buena de la mala información. La figura del profesor tiene a este respecto una tarea ineludible.

Son necesarias nuevas competencias a desarrollar por nuestros alumnos: creatividad; innovación; autoconfianza; independencia. Debemos formar a personas con dotes comunicativas y con visión de futuro. Con capacidad de crítica y de cuestionar todo, sin certezas ni reglas. En definitiva, en palabras de Richard Gerver “El reto está en formar a futuros adultos capaces de gestionar la incertidumbre.” Sin olvidar las enseñanzas tradicionales, hay que ofrecer mucho más.

Los profesionales de la educación están en crisis por los siguientes motivos:
- crisis de valores: pues han sido responsabilizados por la sociedad de la educación de los hijos, además de la necesidad de compensar equilibrios entre valores y normas sociales;
- nuevas áreas transversales más un denso currículum;
- los políticos forman a los profesores en técnicas no en comunicación.
El profesorado por su parte debe estar abierto a los cambios y comprometerse a reciclarse y renovarse. Pero para ello es también necesario que la sociedad se lo permita y reconozca. Deben tener más capacidad de decisión que los políticos, y éstos deben confiar en el profesorado. Además, los políticos no pueden culpar a los profesores de un fracaso del sistema educativo creado y gestionado por el gobierno. Un lema para los docentes: la presión no debe poder con la pasión.

Funciones a desempeñar por el educomunicador:
• Proveer un enfoque, juzgar el interés de los participantes y experimentar con diferentes acercamientos.
• Agregar contribuciones propias de interés general.
• Motivar.
• Construir confianza y propósito.
• Animar las legítimas contribuciones de otros.
• Desarrollar y activar a otros, actuar como catalizador, sostener la discusión, resumir, reiterar el desafío, monitor en la comprensión y equivocación, dar feedback
• Saber cuándo controlar los grupos, cuándo permitirles ir, cómo llevarse con los no participantes, saber cómo marcha la discusión.
• Capacidad para explorar ideas, desarrollar argumentos, promover las líneas valiosas, cerrar las líneas improductivas, construya una comunidad de aprendizaje.
• Capacidad para activar debates proponiendo y cuestionando.
• Mostrar una positiva actitud, compromiso y entusiasmo para el aprendizaje.
• Capacidad para la diversidad con sensibilidad cultural.
• Tener autoridad para otorgar normas.
Modelo de participación activa

Podemos afirmar que educarse es involucrarse en una múltiple red social de interacciones. Y es desde este punto de vista desde el cual subrayo la necesidad de un uso crítico y creativo de los medios desde la escuela.
Las palabras que destaco a este respecto son participación e interlocución.

Y ahora, contra los apocalípticos de la Escuela de Frankfurt me permito afirmar con Umberto Eco (“Para una guerrilla semiológica”) que el medio no es el mensaje, sino que el mensaje depende del código, es decir, que el mensaje puede ser interpretado de distintos modos.

Pasamos brevemente a definir el concepto de Educomunicación: construcción y reconstrucción de un pensamiento crítico. La tarea de los docentes será la de generar estrategias integrales para un aprendizaje didáctico de todo lo que de positivo tienen los medios de comunicación.

Una de las prioridades de un educomunicador del siglo XXI es proponer a sus alumnos analizar diariamente una noticia de relevancia social. Así como también elaborar unidades didácticas de hechos relevantes que inviten a no olvidar el pasado, contextualizar los hechos desde una perspectiva histórica global, romper con tópicos y estereotipos. La práctica dialógica en las aulas es primordial, así como rescatar el diálogo socrático platónico, la alternancia de opiniones, el debate espontáneo o preparado. Y no sólo se para ahí, sino que debemos sembrar la iniciativa para que el debate y el flujo e intercambio de opiniones continúe en la red. Personas que piensan son personas que conocen los problemas de su tiempo y saben enfrenarse a ellos. Educar implica cultivar, hacer más fructíferos y libres a nuestros alumnos.

La escuela, en palabras de Genevieve Jacquinot “debe situarse ante todas las pantallas”, es decir, debemos convertir a los medios en aliados.
La educomunicación supone la construcción y reconstrucción de un pensamiento crítico.

La función de los profesores debe ser pues la de desarrollar un público alfabetizado para los medios y para la política. Pues la única garantía de valores de servicio público es la existencia de un público capaz de reconocerlos y articularlos.

Es importante diferenciar progreso de la educación para los medios del progreso en el campo de las tic.
Se trata de dotar de herramientas para el manejo autónomo y crítico de la información y la cultura.
La escuela debe enseñar los códigos para acceder a lo que se esconde detrás de los documentos audiovisuales.
Una comprensión crítica de la cultura de los medios requiere que los estudiantes desarrollen la capacidad para interpretar los significados de los medios y que comprendan de qué manera consumen y se implican afectivamente con ellos. Pues ya sabemos que los medios hacen pasar por naturales mensajes muy sofisticados y elaborados.

Algunas ideas estratégicas:
- Fomentar lecturas diferentes y críticas de una misma noticia
- Explicitación de los supuestos
- Deconstrucción que identifique representación-realidad
- Análisis del nivel ideológico: ¿qué le sugieren las imágenes? ¿Cómo influyen en ellas estereotipos, simplificaciones?
- Producción de mensajes alternativos
- Importancia de introducir el nivel ideológico

Distintos modelos de educomunicadores:
- Enseñanza de la tecnología y los medios. Alumnos: operadores técnicos.
- Rol playing: alumno: simulacro de periodista, director de cine o presentador.
- Análisis de medios. Formar un analista.
Lo ideal es la integración de todos los anteriores.

El profesor debe actuar como guía, pero siempre propiciando que sean los alumnos los protagonistas de la construcción de su propio aprendizaje, así éste será significativo. Profesor y alumno deben estar en un continuo intercambio, alimentando el feed back y la mutua retroalimentación.

¿Cómo debe hacerse?

Constructivismo más Teoría conectivista. Todos aprendemos con todos.

Podría definirse el aprendizaje colaborativo como: El conjunto de métodos de instrucción y entrenamiento apoyados con diversos medios así como de estrategias para propiciar el desarrollo de habilidades mixtas (aprendizaje y desarrollo personal y social), donde cada miembro del grupo es responsable tanto de su aprendizaje como del de los restantes miembros del grupo. (Pianucci, 2000).

La enseñanza se concibe como un proceso de continua negociación. Los alumnos, organizados por grupos, interactúan, cooperan y comparten, se afectan mutuamente, intercambian ideas y vuelven a plantear un proyecto fruto de la cooperación e intervención común hasta lograr alcanzar un grado de satisfacción y logro mutuo.
El profesor es un agente mediador, debe proporcionar seguridad al alumno y permitirle que éste se apropie de su propio conocimiento y lo transfiera al resto del grupo.
Ahora bien, cada miembro del grupo debe ser responsable de aportar su trabajo al producto final, lo que requiere participación activa e implicación a todos y cada uno de los miembros del grupo.

En resumen, para lograr el aprendizaje colaborativo son necesarios los siguientes elementos:

• Interdependencia positiva: Elemento central. Los miembros del grupo deben necesitarse los unos a los otros y confiar en el entendimiento y éxito de cada persona. Deben establecer conjuntamente metas, tareas, recursos, roles y premios.

• Interacción: Todos aprenden con todos. Gracias a la retroalimentación, el grupo se enriquece.

• Contribución individual: Cada miembro del grupo debe asumir íntegramente su tarea y, además, tener los espacios para compartirla con el grupo y recibir sus contribuciones.

• Habilidades personales y de grupo: La vivencia del grupo debe permitir a cada miembro de éste el desarrollo y potenciación de sus habilidades personales; de igual forma permitir el crecimiento del grupo y la obtención de habilidades grupales como: escucha, participación, liderazgo, coordinación de actividades, seguimiento y evaluación.

El Conocimiento debe ser fruto de construcción colectiva en un modelo de comunicación dialógica. Todos hemos de ser emirecs: ser emisores y receptores al mismo tiempo y en todo momento de la comunicación. Y el objetivo final es la figura de Prosumer: suben información a la red y a la vez son consumidores.
La característica de esta cultura: formas de pensamiento no lineales, negociaciones, distintos estilos cognitivos y emocionales.

Un modelo comunicativo bidireccional: a favor de un proyecto de sociedad centrado en la inteligencia colectiva mediante los intercambios libres de conocimiento. Sus características son la reciprocidad, la asunción de los puntos de vista de distintos usuarios y la consecución de un verdadero proceso comunicativo. La teoría del aprendizaje en la que se sustenta es, como he advertido más arriba, el constructivismo. El aprendizaje es un proceso activo de construcción; la enseñanza es un proceso de apoyo a esa construcción; y sus notas definitorias son la colaboración, la interacción, la iniciativa, la autonomía, la motivación y la amplitud de materiales.

Para concluir, subrayamos uno de los autores más destacados al hablar de educomunicación, Edgar Morin. Para este autor es urgente la tarea de educar para la comunicación y el pensamiento crítico. Fomentar una inteligencia que despierte la curiosidad intelectual y la necesidad de hacer preguntas.
En definitiva, un conocimiento capaz de criticar el conocimiento; que ofrezca la garantía de conocimiento pertinente, frente al aluvión de información; que enseñe la condición humana; que potencie el desarrollo intelectual, afectivo y moral; que ayude al alumno a afrontar incertidumbres; y que enseñe la comprensión y la ética del género humano.


4. ¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE LA REPRESENTACIÓN?

Un cuestión que quiero considerar ahora es el de tesis de la brecha divisoria entre tecnología y minorías. A mi manera de plantearlo, a través de la formación y el conocimiento Internet abre la posibilidad de la representación de minorías. Uno puede ser prosumer, esto es, la red ofrece la posibilidad no sólo de ser consumidores sino también, y esto es lo novedoso, de poder crear en el ciberespacio nuestras propias representaciones partiendo fundamentalmente del propio mundo de la vida (lebenswelt).

Ello posibilita refutar estereotipos, construcciones de etnicidad basadas en simplificaciones que han poblado hasta ahora la red así como los medios de difusión tradicionales.

Lo quiero destacar es la posibilidad de usar la red como un elemento de contestación, de respuesta, de refutación y resistencia.

La interactividad nos ofrece la capacidad de interactuar con la información y la imagen para cambiar, reformular y adaptar los datos a nuestros propios objetivos.

5. CONCLUSIONES

He realizado un breve análisis de la sociedad actual y la influencia de los medios en los individuos para constatar que la sociedad ha cambiado y que necesitamos un nuevo paradigma educativo que esté a la altura de los tiempos. En consecuencia, hemos propuesto un modelo Educomunicativo, un modelo capaz de alfabetizar el público para los medios, sin perder capacidad crítica ni libertad. A ello se une las nuevas posibilidades que brindan las TIC para un necesario cambio metodológico basado en al aprendizaje colaborativo, que tiene como modelo pedagógico el constructivismo social y el conectivismo, y aboga por un modelo comunicativo bidireccional, esto es, todos somos emirecs, emisores y receptores críticos de la información.

Es importante no perder de vista que el conocimiento tiene una dimensión práctica, esto es, el conocimiento debe transformarse en acción.

6. BIBLIOGRAFÍA.
Castells, Manuel Comunicación y Poder. Alianza, 2008
Callejo Gallego, J El Esquema espaciotemporal en la sociedad digital
Aparici, R. Conectados en el ciberespacio.
Aparici, R. La construcción de la realidad en los medios de comunicación.
Lipovetsky G., La era del vacío. Anagrama. Barcelona, 1987.
Lyotard J.F., La postmodernidad, Gedisa. Barcelona, 1987.
Id, La diferencia, Gedisa, Barcelona, 1990.
Id, La condición postmoderna, Cátedra, Madrid, 1986.
Vattimo G. El fin de la modernidad, Gedisa, Barcelona 1986.
Habermas J. Conocimiento e interés, Taurus, Madrid, 1988.
Bauman, Z. Los retos de la educación en la modernidad líquida, Gedisa, Barcelona, 2007.
Donna Haraway, “Manifiesto para cyborgs: ciencia, tecnología y feminismo socialista a finales del siglo XX”, en Ciencia, cyborgs y mujeres. La reinvención de la naturaleza (1991), Cátedra, Madrid.

Mariano Fernández Enguita, “Las desigualdades de clase, género, etnia y ciudadanía ante la educación”.

Artículos de lectura obligatoria para superar la asignatura:

- Umberto Eco “Para una guerrilla semiológica”.
- La educomunicación para los medios. Objetivos, valores y autopistas. Len Masterman.
- Educomunicación en el siglo xxi. Agustín García Matilla

- Alfabetización audiovisual: una respuesta crítica a la pedagogía cultural de los medios. Aquilina Fueyo Gutierrez.

- La reinvención de la educomunicación. Aparici Roberto.

- Configuración y gestión de Plataformas Digitales. Sara Osuna y Roberto Aparici.